LA ARQUITECTURA DEL MOVIMIENTO MODERNO. RACIONALISMO: LE CORBUSIER. ORGANICISMO: FRANK LLOYD WRIGHT.

LA ARQUITECTURA DEL MOVIMIENTO MODERNO. RACIONALISMO: LE CORBUSIER. ORGANICISMO: FRANK LLOYD WRIGHT. 

La arquitectura de la primera mitad  del siglo XX se bifurca en dos corrientes: una europea "racionalismo", que tendrá su máxima expresión en los arquitectos de la Bauhaus y en Le Corbusier; y otra norteamericana "organicismo" con Frank Lloyd Wright. Estos autores crearon obras paradigmáticas de esta nueva arquitectura desde propuestas y enfoques distintos.

Los grandes maestros del movimiento moderno fueron Walter Gropius, Mies Van der Rohe, Wright y Le Corbusier.

Los objetivos de esta nueva arquitectura serán la funcionalidad, el urbanismo, la mejora de las condiciones físico-higiénicas de los espacios humanos, el uso de vidrio, acero y hormigón armado y las superficies simples con plantas diáfanas.


1- LA BAUHAUS

El Movimiento Moderno se inicia en 1919 con la creación de la Bauhaus (escuela de diseño, arte y arquitectura fundada por Walter Gropius en Alemania) clausurada en 1933 cuando los profesores huyen del nazismo. En 1996 la UNESCO declaró Patrimonio de la Humanidad los edificios realizados por la Bauhaus en las ciudades de Weimar y Dessau. Este término alemán significa “casa de la construcción”. Fue un movimiento cultural y artístico que surgió en la primera escuela de diseño, arte y arquitectura del mundo. La escuela de la Bauhaus, fundada en Weimar en 1919 en Weimar por Walter Gropius, se trasladó a Dessau y posteriormente a Berlín. Este grupo estaba formado por profesionales con la idea de crear prototipos de casas unifamiliares utilizando materiales como el acero, el cobre o el vidrio para potenciar una arquitectura barata y que favoreciera el espíritu comunitario.

Uno de sus principios básicos fue la frase “la forma sigue a la función”. Expresa que las  dimensiones y la apariencia deben reflejar la función a la que el objeto sirve Todo lo demás es superfluo. Crearon fundamentos para las tendencias de la arquitectura moderna y del edificio industrial, favoreciendo la producción en serie de los objetos funcionales cotidianos. En España esta corriente fue introducida por el zaragozano Fernando García Mercadal.

Walter Gropius fue un arquitecto berlinés pionero de la arquitectura moderna y máximo representante del racionalismo alemán y fundador de la Bauhaus, su primer director y autor de su manifiesto, donde sostiene que el artista y arquitecto tiene que ser a a su vez artesano y conocer los materiales, y dominar las teorías de las formas y del modelado. Su oposición al nazismo y la cierre de la escuela lo llevaron a instalarse en EEUU, donde fue profesor y director de la Escuela de Diseño. Su arquitectura se caracteriza por el uso de estructuras metálicas finas, la simplicidad de las formas, las fachadas lisas con líneas bien definidas, sin adornos superfluos, grandes superficies acristaladas, cubiertas planas y formas ortogonales. Todas estas cualidades quedan reflejadas en el edificio que creó para la segunda sede de la Bauhaus en Dessau. 


2- LE CORBUSIER 

El Racionalismo intenta adaptar las nuevas técnicas constructivas a las necesidades funcionales de la sociedad. Utiliza materiales como el hierro y el hormigón armado y los edificios se construyen atendiendo a figuras geométricas simples y la decoración consiste en volúmenes macizos y grandes vanos acristalados. Predominan las plantas diáfanas. Se utiliza el color y el detalle constructivo, pero sin decoración superpuesta.

Los objetivos del Racionalismo de las primeras décadas del siglo XX fueron la funcionalidad, el urbanismo y la mejora de las condiciones físico-higiénicas de los espacios humanos. Para ello los edificios se proyectan según su función.

Respecto a la estructura, los pilares van a sustituir a la columna y al arco. La línea recta predomina en la arquitectura.

El Racionalismo también tiene importancia en Holanda. El grupo De Stijl reconstruyen el desastre causado por la Primera Guerra Mundial con edificios cúbicos y sobrios. 

Pero el gran maestro de este movimiento será Le Corbusier (sobrenombre profesional de Charles Édouard Jeannette), pintor, teórico y arquitecto, que regula la arquitectura según la medida humana y crea el “modulor” que fija en 2,16m. Las viviendas se elevan sobre una terraza-jardín. El resto de la estructura se ajustaba a las necesidades del cliente usando El hierro y cemento. Usa bloques elevados sobre pilares cilíndricos de acero, “pilotes”, que separan el edificio del terreno. De esta manera la construcción queda como en suspensión. Las cubiertas son planas y ajardinadas, la planta libre, las fachadas independientes de la estructura (diseño libre), y las ventanas grandes y alargadas.

Sus principales obras fueron:

1- “La Villa Savoya”: construida en Poissy, a las afueras de París, en 1929, es uno de los grandes exponentes de la arquitectura moderna. Tiene forma de paralelípedo blanco apoyado sobre pilotes. Fue construida con hormigón y acero. En ella puso en práctica los cinco principios que caracterizan su arquitectura.

2- “Unité d´Habitation”

3- En los años trabaja con la línea curva y el cemento sin pulir. Ejemplo: la capilla de peregrinos “Notre Dame du Haut en Ronchamp” (1950-1955). Transmite espiritualidad, solemnidad y poesía, y en ella se reúnen lo constructivo y estructural. Es un espacio sacro resuelto con sentido geométrico, cubista, sin jerarquías y con la luz interior como protagonista.


3- FRANK LlOYD WRIGHT

Frank Lloyd Wright crea el Organicismo. Promueve la armonía de la arquitectura con la naturaleza, con el entorno y con el ser humano. Para él, la vivienda debía ser habitable y el hombre debía sentirse cómodo. Wright vive dos periodos de grandes éxitos separadas por una época de inestabilidad. Opuesto al racionalismo, sus viviendas son de líneas sencillas, novedosas por su funcionalidad, técnica y formas. Serán más flexibles y orgánicas gracias al uso de materiales artesanales y autónomos como la piedra, la madera y el ladrillo de cara vista. Destacan los amplios aleros voladizos, las cubiertas un poco inclinadas que sobresalen de la línea de fachada y el predominio de ventanas horizontales.
En la etapa inicial ( 1909) alcanza el éxito por las “Casas en la pradera” organizadas en una planta cruciforme, imitando a Palladio, en varias alturas en torno a una chimenea central.
La segunda época se inicia en 1936 con el diseño de la “Casa de la Cascada o Casa Kaufmann”.  La casa se sitúa en un bosque de Pensilvania, encima de la cascada y se conecta con la naturaleza desde los voladizos de hormigón. Esta casa fue diseñada, según palabras del propio autor “para oír la música de la cascada”. La casa y su manera de  relacionarse con el entorno era muy importante. El conjunto se organiza en torno a un bloque de piedra que alberga la chimenea y la escalera. A partir de este elemento se desarrollan las distintas terrazas, horizontales y superpuestas. La casa consta de tres plantas, que se escalonan en el terreno para salvar el fuerte desnivel. El espacio interior ha sido diseñado con total libertad. No está predeterminado por la estructura del edificio, sino que se dispone según las necesidades, resultando un espacio diáfano y funcional.

Destaca también el Museo Guggenheim de Nueva York, utilizando su nueva obsesión por el círculo. El museo tiene dos edificios troncocónicos y un sistema museístico de circulación y exposición que se lleva a cabo mediante la rampa que rodea el hueco central y que va descendiendo poco a poco. La cúpula sobre nervios otorga una iluminación natural. Este museo fue creado para exhibir el arte vanguardista.

El organicismo de Wright influyó en muchos arquitectos, un buen ejemplo es de danés Jorn Utzon (1918-2008), que realizó el proyecto de la Ópera de Sidney.

4- MIES VAN DER ROHE (1886-1969)

Fue un arquitecto y diseñador industrial alemán, colaborador de Gropius y director de la Bauhaus en su última etapa. Su arquitectura es de carácter universal, sencilla y honesta, tal como refleja su famosa frase “menos es más”, lema que adoptarán los arquitectos vanguardistas.

En 1930 abandonó Alemania ante el auge del Nazismo y se instaló en Chicago, donde fue decano se la Escuela de Arquitectura. Allí en EEUU destacó como diseñador de grandes rascacielos. En ellos aplicó su teoría de arquitectura de “piel y huesos”: los huesos serían la estructura de hierro y acero, y la piel el vidrio. Quizás el mejor ejemplo sea el edificio Seagram. Sus rascacielos fueron imitados hasta la saciedad en los principales centros de negocio del mundo, por lo que se le considera el máximo representante del estilo internacional.

Pero también tiene una segunda faceta como diseñador de edificios en horizontal, de pequeñas dimensiones, como pabellones y viviendas. En este sentido destaca el Pabellón de Alemania diseñado para la exposición Internacional de Barcelona en 1929, hoy reconstruido. Era ortogonal, asimétrico, sobre un zócalo de travertino y cubierta de hormigón armado en voladizo, sostenida por unas barras de acero cromado con perfiles de cruz. El edificio pretendía reflejar los valores de la República de Weimar: racionalismo, austeridad y transparencia. En el exterior, un estanque rectangular, que se asemeja a un cristal, refleja el edificio.

También destaca la casa Fransworth (1946), en Illinois, que cuenta con una estructura de acero y vidrio.


5- URBANISMO

En esta época se realizan grandes planes urbanísticos para mejorar y racionalizar el uso humano de las ciudades y espacios colectivos. Un gran ejemplo fue la ciudad de Brasilia, nueva capital federal de Brasil entre 1955 y 1960. Su ubicación en el centro de la nación y alejada 1000 kilómetros de la costa se debió a la necesidad de valorizar el interior del país ente el peso socioeconómico de las ciudades costeras. En su diseño fue consagrado de manera internacional el arquitecto Oscar Niemeyer (1907-2012), introductor en Hispanoamérica de la arquitectura moderna, y el urbanista Lucio Costa.

La capital se construyó sobre un espacio despejado, formado por sus grandes explanadas e integrado en un entorno natural. Su plano tiene forma de cruz: un gran eje central de 6 km de largo destinado a actividades administrativas, otro eje transversal el primero sirve para usos comerciales y residenciales, agrupados alrededor de escuelas e iglesias. Todo en esta ciudad tiene un carácter monumental. 

Fue una capital innovadora de gran cohesión arquitectónica, donde los grandes volúmenes de los rascacielos conviven con edificios de gran belleza plástica, formas nuevas e imaginativas y superficies curvas como la catedral y el palacio presencial.